#MiniYoru | The Super Mario Bros. Movie (2023)

PASIÓN POR UNA PELÍCULA CORRECTA

Resulta increíble como una película apenas correcta consigue levantar tan fuertes pasiones en el público general: Desde quienes la consideran la epitome del cine, hasta aquellos que la señalaron como la mayor porquería que hayan tenido la desgracia de ver en un cine. Sin duda, esta es una cinta que odias o amas sin puntos medios. 

Y lo cierto es que estoy haciendo una excepción aquí porque normalmente no sería tan duro con una película dirigida al público infantil, que no al familiar como es el caso de muchas otras películas de las que he hablado en este espacio. Ensañarse con esta cinta sería el equivalente a señalar los agujeros y conveniencias argumentales en la película de PAW Patrol. 

EL ADVENIMIENTO DE LAS PELIS SOBRE VIDEOJUEGOS

No obstante, el hecho de que esta cinta haya batido todos los récords de taquilla siembra un mal precedente para la industria. Le estamos enseñando a los grandes estudios que no es necesario hacer buenas películas, basta con lanzar un montón de referencias nostálgicas y el público alabara sus productos como si de la nueva venida de Jesús se tratase. 

Y, ojo, no estoy diciendo que la película de Super Mario sea mala, como lo mencione al principio me parece una cinta correcta. Y si bien es muy poco probable que Nintendo se convierta en un proxeneta de sus IP más reconocidas y no veremos cintas de otras franquicias populares como Zelda, Kirby o Metroid en el corto plazo, si veo a otras compañías aprovechando este nuevo boom del cine basado en videojuegos.  Estoy cien por ciento seguro de que en poco tiempo tendremos en la pantalla grande a títulos reconocidos como Crash Bandicoot o Spyro, algunos más olvidados como Rayman o Ratchet. O Si quisiera volverme loco, diría que en este punto hasta Pepsiman podría tener su propia película.

RECUERDOS DE UNA INFANCIA IDÍLICA 

No voy a mentir, pese a no ser un fan acérrimo del plomero italiano me divertí bastante mirando esta película. E inclusive, siendo una persona que conoce la franquicia solo diametralmente, pude captar la mayor parte de las referencias mostradas en pantalla. Sin lugar a dudas, la cinta consigue evocar memorias idílicas de la infancia perdida en aquellos afortunados que poseen un vínculo emocional con la franquicia. 

No obstante, este es justo el mayor problema con la película de Super Mario Bross: tiene la profundidad de un charco en el pavimento. Lo cual está bien en principio. Después de todo es una película infantil, no tendría por qué tener un propósito mayor al de entretener a los niños y dejarles una moraleja sencilla. Que tanta gente adulta la allá disfrutado es más bien un éxito secundario. Tomando esto en cuenta, es natural que los críticos que carecen de dicho vínculo emocional la hayan hecho trizas. Pues, si eliminamos este factor nostálgico la película pasa a ser poco más que un costoso comercial glorificado.

Como pasa con toda obra artística, su valor recae menos en lo que es y más en la forma en que la que el público se relaciona con ella.

SON CARICATURAS, MI'JO

Tal como dije, señalar los fallos de una película enfocada totalmente al público infantil resulta un tanto inapropiado. Sin embargo, este es mi blog y lo voy a hacer de todos modos. 

No puedo pasar por alto, como una historia que se había mantenido más o menos consistente durante los dos primeros tercios, colapsa en el último de ellos. Pareciera que falta tiempo para dar una conclusión a los conflictos planteados. Sin mencionar que la resolución de la cinta, es decir, todo el rollito de la flor azul; termina siendo un deus ex maquina en toda regla. Pues, si bien este este es un item que existe en los juegos de Mario Bross; dentro de la película nunca se nos presenta propiamente ni se esclarece su origen. 

Así mismo, aun conociendo medianamente la franquicia, no entiendo porque el reino de los Kong tenía acceso a vehículos super avanzados. ¿Hay alguna pieza de lore super escondida que me estoy perdiendo? o directamente nos aplicaron un «Mi'jo, no este chingando, son caricaturas» 

EN EFECTO, ESTÁ PELÍCULA EXISTE

De cualquier forma, mi único veredicto para esta cinta seria: «Super Mario Bross es, en efecto, una película que existe» Ceo que no necesito hacer ninguna recomendación de esta cinta pues a quienes les interese ya la habrán visto un millón de veces. Y los que no, en este punto ya deben estar hartos de todo lo relacionado a Mario Bross tras verse expuestos a un loop interminable de la canción «Peaches, peaches, peaches» sonando en el ambiente todo el tiempo.